Elkarrekin Podemos ha registrado una moción en las Juntas Generales de Araba para que se reclame a la Diputación Foral y al Gobierno vasco que no colaboren o detengan cualquier tipo de colaboración con personas o empresas dedicadas a la producción, comercialización y financiación de armamento o tecnología de uso militar.
Cumplir la ley
La formación progresista exige que se cumpla de forma escrupulosa con la Ley 3/2024 de Cooperación y Solidaridad del Parlamento Vasco, que en su artículo 10, punto 4, afirma que “el sector público de la Comunidad Autónoma de Euskadi, en sus políticas de promoción económica, no colaborará con aquellas personas físicas o jurídicas dedicadas a la producción, comercialización y financiación de armamento o tecnología de uso militar”.
Por ello, la moción pide que se exija a los gobiernos vasco y foral que cumplan con este articulado y, además, detengan toda colaboración con personas físicas o jurídicas que trabajan en el sector armamentístico.
Mensajes institucionales
La iniciativa para cerrar las puertas a cualquier tipo de colaboración surge por la preocupación que generan los crecientes mensajes de representantes de empresas e instituciones vascas llamando a la necesidad de subirse al carro del rearme europeo por la oportunidad que supone para la economía e industria.
Su portavoz, David Rodriguez, ve muy preocupante la actual construcción de una estrategia de socialización en torno a la oportunidad obligada que presenta la expansión de la industria armamentística como una fuente de empleo, desarrollo tecnológico y prestigio geopolítico. Además, censura los apoyos y subvenciones recibidos que el sector está recibiendo por las diferentes administraciones vascas.
A este respecto, señala que el pasado 1 de abril, Aernnova, Indra, ITP y otras empresas celebraron una cumbre en el Parque Tecnológico de Araba, en un evento organizado por la Asociación de Empresas Tecnológicas de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio (TEDAE), en colaboración del clúster aeroespacial vasco HEGAN y la Agencia Vasca de Desarrollo Empresarial SPRI y la Diputación Foral de Araba, donde pusieron de manifiesto el crecimiento que está experimentando el sector.
En la última década -recuerda Rodríguez- el número de empresas vascas involucradas en el sector armamentístico se ha más que duplicado, y ya se superan de largo las 200 compañías. Asimismo, el Gobierno vasco, más allá de las ayudas y subvenciones, mantiene un 6% de las acciones de la empresa vasca del sector, ITP Aero, que ha alcanzado ingresos récord en 2024, en gran parte por el contexto favorable para su división de defensa.
Contestación social
Rodríguez asevera que no se puede colaborar desde las instituciones públicas con quien está haciendo negocio con el rearme. “Estamos ante una industria que contribuye cada vez en mayor medida a que las guerras activas en otras partes del globo empiecen aquí, porque los artefactos que las hacen posibles se fabrican aquí”, subraya. En este sentido, asegura que el aumento del apoyo público institucional al sector se produce entre la cada vez mayor contestación social en Euskadi a la participación de empresas en la fabricación de componentes para los actuales conflictos mundiales, desde a Palestina a Ucrania.
Pregunta en el pleno
El registro de la moción no es la única iniciativa presentada por Elkarrekin Podemos al respecto en las Juntas Generales de Araba. Este miércoles, en el pleno de control, Rodríguez interpelará en pleno al diputado general de Araba, Ramiro González, por su postura ante el llamamiento empresarial e institucional en Euskadi a aprovechar el rearme europeo como una oportunidad para la industria y la economía vasca.
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