La OSI Araba de Osakidetza ha editado una Guía de sedación paliativa cuyo objetivo es «unificar criterios desde el punto de vista clínico, para realizar correctamente la indicación y el procedimiento de sedación en el paciente en situación de cuidados paliativos», «establecer un riguroso marco ético, previo a la aplicación de dicha sedación», «apoyar a los profesionales de la OSI Araba en esta toma de decisiones y promover y proteger los
intereses de los pacientes, sus familias y las de los propios profesionales».
Éticamente aceptada
La atención sanitaria al final de la vida tiene como objetivos el control sintomático y el acompañamiento del paciente junto con el soporte necesario a su entorno familiar, respetando siempre un riguroso marco ético en el proceso de la toma de decisiones. «En algunos casos -señala el documento-, a pesar de utilizar los tratamientos disponibles más adecuados, no es posible controlar todos los síntomas de forma adecuada, por lo que se plantea la sedación como la opción terapéutica más apropiada». En ese sentido, la sedación paliativa es una medida terapéutica legalmente permitida y éticamente aceptada, considerada como una buena práctica médica, siempre que el procedimiento se realice con una indicación, objetivo y evaluación adecuadas.
La guía recuerda que «es complicado conocer la incidencia real de los casos que precisan sedación debido a la existencia de múltiples definiciones y términos alternativos, por lo que el documento trata de «concretar definiciones que nos permitan una actuación y toma de decisiones más uniforme y consensuada».
Aplicación prudente
La guía sale a la luz porque «esta medida terapéutica requiere una aplicación prudente guiada por una buena práctica. No tener en cuenta riesgos potenciales o prácticas erróneas puede llevar a aumentar aún más el sufrimiento de enfermos y familiares en circunstancias de gran vulnerabilidad, así como a situaciones no éticas o dañinas que menoscaben la credibilidad y la confianza de los profesionales y las instituciones.
Aliviar el sufrimiento
La sedación paliativa está destinada a aliviar el sufrimiento refractario al final de la vida mediante el uso proporcional y monitorizado de fármacos orientados a reducir la consciencia del paciente. La sedación paliativa tiene importantes implicaciones sociales y éticas que requieren una consideración específica por parte de los pacientes, la familia y los profesionales sanitarios.
Se aplica a pacientes con sufrimiento refractario al final de la vida; las guías sugieren un periodo de tiempo de días a menos de 2 semanas; debe ser siempre proporcional al alivio de las necesidades del paciente, y la intencionalidad es siempre prudente y reflexionada.
FOTOGRAFÍA: Irekia
