El Consejo de Gobierno ha aprobado este la licitación para la construcción de una planta de compostaje, KonpostAraba, que estará ubicada en el sector industrial 21 de Júndiz, ocupando una extensión de 30.196 metros cuadrados. El presupuesto destinado a tal fin asciende a 34.042.250 euros (IVA incluido) con un plazo de ejecución de 15 meses.
La futura infraestructura, que estará situada muy próxima a la planta de tratamiento mecánico biológico (TMB) en Vitoria-Gasteiz, permitirá dar respuesta a la fracción orgánica recogida de forma separada en Álava. La nueva planta se proyectará con una capacidad de diseño inicial de 13.000 toneladas al año, ampliables en una segunda fase hasta permitir tratar 23.000 t/año de materia orgánica.
Visitas educativas
La tecnología prevista será la de fermentación en túneles y maduración en pilas, dispondrá de placas fotovoltaicas para una mejor eficiencia energética y posibilitará la reutilización del agua para un menor consumo de este recurso. Asimismo, para una mayor concienciación de la ciudadanía en relación a la gestión de los residuos resulta fundamental dar a conocer estas infraestructuras y para ello el diseño de esta planta permitirá la visita con fines educativos medioambientales.
Esta actuación está contemplada dentro del Programa de Infraestructuras del Plan de Prevención y Gestión de Residuos Urbanos de Álava 2017-2030, y posibilitará seguir trabajando por el cumplimiento de los objetivos de reciclaje fijados a nivel europeo para 2025 y 2030. Los biorresiduos representan el 51% de los residuos recogidos en el contenedor gris, por lo que su recogida selectiva y gestión adecuada resulta determinante para poder reducir la cantidad de residuos eliminados en vertedero.
Es una de las fracciones prioritarias a mejorar en su tratamiento de acuerdo con el citado Plan de Prevención de Residuos. Su transformación en un compost aprovechable en los suelos agrícolas es, sin duda, una mejor alternativa teniendo en cuenta la jerarquía de residuos. Todavía se desecha un gran volumen de residuos potencialmente aprovechables a los vertederos, materiales que se pueden reintroducir de nuevo a través de diferentes tecnologías o soluciones innovadoras más circulares.
Recogida selectiva en toda Álava
Con esta nueva inversión, se contribuye a dar una segunda vida a los residuos generados en los hogares, en este caso, mediante la transformación de la fracción orgánica en fertilizante para la agricultura. Considerando la evolución positiva que, gracias a la colaboración de la ciudadanía, está habiendo en la recogida selectiva de materia orgánica, la nueva planta de compostaje vendrá a suplir el déficit de capacidad de tratamiento que en los próximos años se dará. Además, teniendo en cuenta la previsión de implantar en todas las localidades del territorio sistemas de recogida selectiva generalizada para esta fracción de residuo, lo que dará lugar a un incremento de la cantidad generada.
La construcción de esta planta ha recibido, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea, una subvención para el apoyo a la implementación de la normativa de residuos y el fomento de la economía circular en Euskadi por un importe de un millón de euros.
FOTOGRAFÍA: Txus Díez