El Boletín Oficial del País Vasco ha publicado este martes la resolución que deja sin efecto el Proyecto constructivo de la estación de aforo de Aprikano, inicialmente aprobado por URA en septiembre de 2024 y sometido a información pública en octubre del mismo año.
La paralización del proyecto llega después de que Zadorra Bizirik «trasladara oficialmente a URA el pasado 14 de enero la gravedad del impacto ambiental que supondría ubicar la estación de aforo en un tramo de altísimo valor ecológico, con una vegetación de ribera en estado de conservación sobresaliente, según el Índice de Calidad del Bosque de Ribera (QBR)«, ha señalado esta plataforma.
Una ubicación alternativa
Según detalla la propia Agencia Vasca del Agua en la resolución hecha pública, se han recopilado nuevos datos y se valora ahora la posibilidad de situar la estación en una ubicación alternativa con menores afecciones para el ecosistema fluvial. URA ha anunciado que dejará en suspenso la tramitación del actual proyecto y contratará los trabajos necesarios para la redacción de uno nuevo.
“Es una muy buena noticia que demuestra que la presión social y la defensa del territorio funcionan. La vegetación de ribera del Baias no podía asumir una agresión de este calibre en uno de sus tramos mejor conservados. La decisión de URA va en la buena dirección y confiamos en que el nuevo proyecto respete plenamente los valores ecológicos de la zona”, ha declarado Zadorra Bizirik.
Siete tramos sobresalientes en el Baias
De los más de 30 kilómetros del Baias, solo 7 tramos alcanzan el nivel más alto de conservación ambiental, y uno de ellos era precisamente el escogido en un inicio para instalar la estación. Zadorra Bizirik había alertado públicamente de que el proyecto implicaba obras en ambas orillas, en el cauce y en la zona de acceso, afectando de forma irreversible a un ecosistema de valor excepcional, además incluido en la Red Natura 2000 como Zona Especial de Conservación (ZEC).
Zadorra Bizirik agradece la receptividad mostrada por URA y reitera su disposición a colaborar en el diseño de proyectos que compatibilicen la gestión hidrológica con la protección estricta de los valores naturales de los ríos alaveses. “Cualquier intervención sobre la vegetación de ribera debe orientarse a su mejora y conservación, nunca a su deterioro. El anuncio de hoy sienta un precedente positivo y un reconocimiento al trabajo colectivo por la defensa del patrimonio fluvial”.
FOTOGRAFÍA: Ayuntamiento de Ribera Alta